dimarts, 11 de maig del 2010

6. Santa Maria d'Arenys

La parroquia de Santa Maria de Arenys de Mar pertenece al Obispado de Girona. Nació como una desmembración de la de Sant Martí d'Arenys de Munt el año 1575, si bien no fue independiente del todo hasta el 1781. El primer rector fue Mn. Grau Gelpí. Fue consagrada el 28-VII-1686 y puesta bajo el patronazgo de la Virgen María Assumpta, la imagen de la cual preside el retablo del altar mayor.Es la segunda iglesia parroquial de Arenys de Mar, empezada a construir el 1584 por el maestro Joan de Tours , y acabada por sus hijos Joan y Dionís Torres el año 1628. En el contrato se pactó la construcción en el estilo renacentista llamado entonces a la romana, si bien la cubierta, tanto de la nave como de las capillas, siguió todavía el estilo gótico. Además, se da la curiosa peculiaridad que las nervaduras de las vueltas góticas arrancan de ménsulas del más puro orden dórico. Esta diversidad entre la construcción renacentista de las cerraduras de pared y las molduras y la gótica de clavesde vuelta, arcos y nervaduras no provoca la contradicción detonante que habría que esperar de un acoplamiento de estilos tan divergentes, sino que muestran un bellísimo apariamento. Cuando fue terminada la obra de la iglesia, se derribó la antigua capilla que había hecho de templo parroquial y que había estado dentro de la iglesia nueva. El Comunidor. Arenys de Mar, la Iglesia y su Retablo Mayor El comunidor, adaptado sobre el que serían las salas de juntas de la Insigne Comunidad de Presbíteros y su archivo, ofrece una silueta inconfundible que, quizás, es una de las partes más características y originales de este monumento.El año 1755, el edificio del templo fue alargado por la banda delantera y se construyó un nuevo portal, ya de estilo barroco, por el maestro Fabià Anglada. Del 1777 hasta el 1789 se hicieron ensanchamientos laterales a manera de crucero, la supresión de las sacristías de las dos bandas del presbiterio y una nueva última el ábside, dirigiendo la obra el arquitecto Joan Mas. No se consumó, pero, todo el proyecto, caro a la banda izquierda no empezó sino a continuación de la capilla de Roser -hoy de la Merced- y se prescindió de un cimbori en forma de media naranja, incluido en el plano. Poco después se acaba la capilla que era autónoma y propia de su Congregación. A mediados de siglo XIX se construyó la capilla del Santísimo SacramentoL 'elemento más destacado de la Iglesia Parroquial de Santa Maria, que justifica su declaración como monumento (M.H.A. 26-2-1976) es, sin duda, el retablo mayor.El 1636, el escultor Antoni-Joan Riera, hijo de Arenys de Mar, recientemente vuelto de los reinos de Castella, donde había trabajado muchos años como escultor y arquitecto, proyectó la base para el retablo mayor, con motivos geométricos, empleando jaspe de Tortosa, y añadió dos bellos relieves con,el escudo de la villa esculpidos en mármol, posiblemente itálico. En la obra, acabada el 1638, trabajaron los maestros Cebrià y Bordoi, bajo la dirección del escultor Riera. Durante muchos años, la Universidad -"léase Ayuntamiento"- y la Obra -"léase Vila"-intentaron salir adelante con la construcción del retablo, que resultaba una obra inacabable. El 1706 se lo emprendió por su cuenta la poderosa Comunidad de Presbíteros de Santa Maria de Arenys de Mar, la cual se concertó con el escultor de Vic, Pau Costa, y se desmontó la parte de retablo construida anteriormente.Pau Costa era uno de los más famosos artistas del barroco en Catalunya, y son suyos los retablos de la Asunción y de Sant Antoni en Torelló, el mayor de Caçà de la Selva, el de la Asunción de la sede de Girona, el de Santo Benet de la catedral de Vic, el de las Tereses y el de Santo Libori a la Piedad de la misma ciudad, el de Roser en Olot, el de Santo Isidre de Sant Vicenç de Montalt, el del Santo Cristo de Berga, el del Santo Cristo en Seva, el de Corbera y el del santuario de la Portella. En Cadaqués, secundado por Jacinto Morató y Joan Torras, Pau Costa copió el que él mismo había hecho en Arenys de Mar en los relieves de la Natividad y de la Presentación de Maria.El año 1711 se encargó el policromato, dorado y estofado de este retablo al maestro de Barcelona Erasmo Vinyals, que, junto con su hijo Fèlix, terminó la obra el año siguiente.Ordinariamente, el estilo barroco tiene la tendencia de complicar le estructuras, que encubre artificiosament, con ornamentación profusa, un estilo ya agotado, y en devalua las calidades arquitectónicas y escultóricas. Pero Pau Costa, en el retablo de Arenys de Mar, aunque sea un prototipo de los de su tiempo, nos da un conjunto monumental que es de todo orden y armonía; la profusión ornamental aquí no es el pretexto para esconder una exigua concepción arquitectónica sino el complemento de las admirables líneas de un esquema lògicamentconstruït. Se muestra, como en todas las obras de Pau Costa, el sello personal de este artista, adaptado, pero, a los más precisos corrientes constructivas del momento; aquí podemos ver las columnas pseudo-salòmoniques y las de follaje helicoidal, que en otras obras del mismo Costa, las más viejas, son de un salomònic puro, y las más tardías, columnas cilíndricas engarlandades. Pau Costa se inspiró, tanto en la imagen de la Asunción de Maria cómo en los relieves de la Natividad, la Presentación, La Visitació y la Epifanía, en grabados del pintor pontificio Carlo Maratta, y hay que reconocer que en muchos aspectos supera y mejora la fuente misma de inspiración.Uno de los méritos a favor de Pau Costa es d?haber aprovechar dignamente el basament preexistente del retablo, a pesar de que conservarlo tal como era impidió de completar la obra de talla con el grande cambril proyectado al principio.Pero la austeridad renacentista de Antoni-Joan Riera liga perfectamente con el retablo de Pau Costa, hasta el punto que no se echa de menos la magnificència barroca de unos ángeles o unos atlants, como los habría tenido caso que retablo y la base se hubieran obrado simultáneamente

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